El arte siempre buscó formas de reinventarse y llegar a su público. Desde hace un tiempo, la instalación de expendedoras de arte en espacios estratégicos confirman la utilidad del vending para promover también otros modos de acercamiento a la cultura.
Expendedoras de Arte, una modalidad para acercar al público y los artistas
La modalidad de las expendedoras de arte se está extendiendo por distintos lugares del mundo. Hace ya varios años, en Buenos Aires, Argentina, una galería de arte instaló una máquina expendedora de obras de artistas locales reconocidos. Por muy bajo precio, las personas podían obtener pequeñas obras de arte de León Ferrari, María Gil Araujo, Mónica Goldstein, Elena Nieves, Mirta Narosky, entre otros creadores del mundo de la plástica y la fotografía. Estas máquinas estuvieron instaladas en lugares estratégicos, como centros culturales, museos y bares. La iniciativa tuvo muy buena respuesta por parte del público.
En esa misma línea, un grupo de estudiantes de arte de Brighton, Londres, crearon una máquina expendedora de obras de arte. Se trata de una máquina instalada en una galería que ofrece a muy bajo precio estas creaciones. El colectivo de artistas que forma parte del proyecto sostiene que la idea es hacer accesible el arte para todos. Y además, en paralelo, se difunde la actividad de artistas jóvenes y locales.
En la galería están expuestas las obras a la venta. Si alguna persona está interesada en llevarse a su casa una copia, simplemente la pide en la máquina y la obtiene a bajo costo. El colectivo de artistas a cargo del proyecto comentó que con esta modalidad se busca romper la distancia entre espectador y el arte como expresión humana. También se busca llamar la atención sobre los trabajos de los artistas con esta novedosa modalidad.

