Cada vez más lugares se suman a la tendencia del vending saludable. La modalidad de ofrecer productos más sanos en las máquinas expendedoras no sólo es para centros educativos, hospitales y demás. Ahora también algunos municipios y regiones están buscando regular ese tema de manera más formal.

Si bien las empresas operadoras de vending pueden proponer un cambio en su oferta, muchas veces el impulso necesario viene acompañado de otro tipo de instancias. Una de las modalidades que ya se está viendo en el mundo es la de legislar para que de manera obligatoria las máquinas ofrezcan el mínimo del 30 por ciento de los productos sanos y altamente nutritivos.

No se trata, entonces, de prohibir los alimentos tradicionales de las máquinas de vending. Se trata de buscar un equilibrio y dar más posibilidades de elección a los consumidores, generando ofertas que se adapten a todos los gustos y que además, sumen en calidad nutricional. La idea es extender esta modalidad a lugares estratégicos, donde el consumo de alimentos poco saludables es elevado. En este sentido, escuelas, universidades y centros deportivos son los espacios clave para comenzar a generar el cambio. El vending saludable comienza a ser un opción cotidiana. 

Las máquinas de vending que ya ofrecen este tipo de productos han mantenido e incluso en algunos casos, incrementado sus ventas. Está demostrado que la oferta de productos saludables es bien aceptada si está a disposición de los consumidores. Por ese motivo, además de proponer una determinada cantidad de productos saludables en las expendedoras se habla de una disposición de los productos a mano del consumidor. De esta forma, si los alimentos sanos, frutas y verduras están a la vista, hay muchas más probabilidades de consumo.

El vending no se queda fuera de las nuevas modalidades de consumo. Como siempre decimos, escuchar a los usuarios y estar atento a las necesidades de las sociedades donde la industria se inserta es fundamental para seguir siendo una industria pionera en el mercado internacional.